¡Hola! Seiiti Arata. ¿Te cuesta alcanzar tus metas con rapidez? Entonces te voy a hablar de una forma rápida, fácil y eficiente para cumplir tus objetivos con más velocidad: contratar el tiempo y el conocimiento de otras personas.
Mucha gente pierde tiempo, energía y dinero intentando cumplir las metas por sí solos, sin ayuda. Por ejemplo, perder peso, abrir una empresa, aprender idiomas, tratar un dolor de cuello.
¿Qué significa intentar hacerlo todo solos, por nuestra propia cuenta? Significa empezar de cero, buscando en internet e intentar alcanzar objetivos a través de intento y error.
En vez de seguir el camino solitario e ineficiente, puedes aprovechar mejor el tiempo y el conocimiento de otras personas.
Aprende a aprovechar el tiempo y el conocimiento de otras personas
Imagina que hay dos personas con la meta de, por ejemplo, adelgazar diez kilos.
La primera persona decide investigar en internet sobre cómo adelgazar. Esta primera persona se crea un menú basándose en todo lo que ha visto en internet y empieza a probarlo, a través de intento y error, qué funciona y qué no funciona para adelgazar.
Va a tener que dedicarle muchas horas a esta investigación. Y para probar qué funciona y qué no, también necesitará mucho tiempo y dinero para comprar alimentos y suplementos que puede que no le sirvan para adelgazar.
La segunda persona lo hace de otra forma. Pide una consulta con un buen nutricionista y recibe un plan listo para llevar a cabo. Este es un plan hecho por un profesional actualizado que ha pasado años estudiando sobre el tema y trabaja todos los días ayudando a la gente a adelgazar.
¿Cuál de las dos personas crees que tiene más posibilidades de alcanzar la meta de perder peso?
La primera persona creía que iba a ahorrar dinero. Pero ha desperdiciado el tiempo intentando aprender todo lo que un nutricionista ha aprendido en años.
Además, no sabe determinar por sí sola el grado de fiabilidad de las fuentes. Le será difícil saber cómo interpretar datos conflictivos. Y tampoco sabrá cómo utilizar datos genéricos para su caso específico.
Mientras tanto, la segunda persona ha ahorrado tiempo. Ha buscado el conocimiento profesional de un buen nutricionista y después de una hora de consulta, le han dado un plan nutricional para seguirlo.
Esta es la gran ventaja de aprender a utilizar el tiempo y el conocimiento de otras personas para conseguir tus propias metas.
Puedes usar el conocimiento de los demás para cualquier objetivo
En el mercado financiero, existe una expresión que se llama trabajar con apalancamiento.
Trabajar con apalancamiento significa que una persona ha cogido dinero prestado de otras personas y ha hecho inversiones. Lo hace porque está apostado que la rentabilidad de esas inversiones vaya a ser grande hasta el punto de pagar al acreedor y aún así lucrarse.
¿Hacemos esta analogía en el campo del desarrollo personal? De forma parecida, apalancar tus metas significa coger prestado el cerebro de otras personas para resolver problemas que te ayuden a alcanzar tus metas.
En el caso de adelgazar con la ayuda de un nutricionista, coges prestado el cerebro de alguien que sabe mucho más de nutrición. Y usas sus conocimientos para resolver un problema.
Puedes hacer lo mismo para cualquier objetivo personal que tengas. Puedes contratar a profesores, consejeros, o profesionales que te transmitan el conocimiento que necesitas para saber cómo alcanzar tus metas rápidamente.
Esto se puede hacer tanto con consultas individuales como a través de cursos o incluso libros.
Pero puedes ir más allá. Además de usar el conocimiento, puedes contratar el trabajo de otras personas para ahorrar tiempo, energía e incluso dinero.
Por ejemplo, digamos que quieres abrir una empresa. Puedes intentar conseguir toda la documentación y procesos burocráticos para empezar… O sencillamente contratar a un contable que haga todo eso por ti.
Incluso pagando, estarás ahorrando dinero
¿Qué hace que la mayoría de gente no quiera usar el conocimiento y el trabajo de otros? Es la falsa percepción de que perderán dinero.
El acceso a información es muy fácil, rápido y barato hoy en día. Por eso muchas personas creen que malgastan dinero al contratar a otras personas para que hagan algo que podrían hacer ellas mismas.
Por ejemplo, hay gente que se niega a pagar a un fisioterapeuta para tratarse un problema en el cuello. Son personas que buscan por sí solas algún ejercicio, crema o incluso un té para reducir el dolor del cuello.
Pero, ¿realmente están ahorrando dinero? Y, aunque sea así, ¿el tiempo extra de hacer la búsqueda compensa ese ahorro?
Para responder a eso, tienes que sopesar las ventajas y desventajas de utilizar tu dinero para aprovechar los recursos de otras personas.
Si tienes una mentalidad de escasez, puedes creer que estás perdiendo el dinero al contratar a alguien. Tu foco de atención estará en la cantidad de dinero que has pagado de tu bolsillo. Dejarás de ver que ese profesional que has contratado consigue resolver tu problema con mucha más calidad y velocidad de lo que lo conseguirías hacer si lo intentases hacer todo por tu cuenta.
Si tienes una mentalidad de abundancia, tu centro de atención estará en el tiempo ahorrado. Vas a entender que estás apalancando tu propio tiempo cuando utilizas bien tu dinero para conseguir tus grandes objetivos con más calidad y velocidad.
Pagar por la ayuda de otras personas no debería ser un tabú
Piensa de forma abundante. Imagina que si consigues liberar tu tiempo, conseguirás ganar más dinero.
¿A quién contratarías para que te ayude a cumplir tus metas? ¿A quién contratarías para transmitir conocimientos? ¿A quién contratarías para hacer ciertos trabajos por ti?
Sea cual sea tu meta, piensa siempre en cómo puedes aprovechar el tiempo y el conocimiento de otras personas. Sé responsable financieramente y calcula las ventajas y desventajas de invertir en estas contrataciones.
Lo que no puedes hacer es mantener una mentalidad de escasez. No pierdas años de tu vida intentando hacer algo por tu propia cuenta por querer ahorrar dinero. Date cuenta de dónde existe la posibilidad de contratar a alguien que te pueda ayudar a cumplir tu meta mucho más rápido.
¿Por qué no aprovechamos el tiempo, el conocimiento e incluso el trabajo de otras personas? Porque existe el tabú financiero de que debemos ahorrarnos todo el dinero que podamos.
Esto nos impide ver el mundo con más abundancia y usar mejor nuestros recursos financieros.
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