¡Productividad Arata! Si tienes problemas para organizarte, el consejo de hoy es utilizar listas de pendientes. Las listas te ayudarán a lograr tus metas y sobre todo harán que seas una persona menos estresada, desorganizada y olvidadiza.
Piensa en un momento reciente en el que te olvidaste de hacer algo importante. ¿No es verdad que eso te causo frustración, estrés y un sentimiento de culpa? Bien, si hubieras tenido una lista en la cual marcar si algo ya está hecho, todo hubiera sido más fácil.
1. Una lista de pendientes reduce nuestro estrés
Para que tu cerebro funcione a su máximo potencial, no quieres desperdiciar su poder en nerviosismo y estrés innecesario. Si usas listas para organizarte, puedes evitar mucha ansiedad causada por no tener control sobre las cosas.
¿Cuál es el consejo que les doy a mis amigos ocupados que se quejan de que tienen miles de cosas que hacer?
Lo primero es calmarse, respirar profundamente y hacer una cosa a la vez. Lo peor que puedes hacer es perder enfoque, intentando hacer muchas cosas a la vez y sin hacer ningún bien.
Todo lo que eso logra es incrementar el miedo a no poder manejar las cosas. Pero tan pronto como empecemos a crear listas, nuestra ansiedad se desvanecerá, porque sabremos que no vamos a olvidarnos de algo importante, ya que está escrito.
2. Una lista de pendientes, mejora las oportunidades de lograr metas
La profesora Gail Matthews realizó un estudio con 267 participantes y observó que el acto de escribir nuestras tareas mejora las oportunidades de lograrlas. Eso está conectado al hecho de que al escribir, generamos más conciencia y compromiso hacia la tarea.
Piénsalo: Si soy demasiado flojo incluso para escribir una oración sobre eso, ¿en realidad estaré motivado a hacerlo?
3. La dinámica entre planear y ejecutar
Para dejar de sufrir de ansiedad, necesitamos tener una imagen general, saber exactamente cuáles son las tareas prioritarias, cuáles opcionales y cuál es la jerarquía de importancia (a esto se le llama fase de planeación y puede terminarse rápidamente), para después avanzar a la fase de ejecución.
Ningún plan es perfecto cuando se concibe, todo plan necesita ser actualizado conforme se realiza. Quizás mientras lo ejecutamos nos damos cuenta de que tenemos que cambiar la jerarquía de algunas tareas, que podemos borrar otras o incluso agregar nuevas. En otras palabras, las fases de planificación y ejecución no están completamente separadas.
Si has seguido el trabajo de la Arata Academy, ya sea aquí a través de nuestros vídeos gratuitos de Youtube (suscríbete) o a través de nuestros cursos avanzados para nuestros estudiantes, te habrás dado cuenta de que siempre enfatizo el valor de hacer las cosas, de la ejecución de acciones que nos traen resultados.
Pero al mismo tiempo tenemos que darnos cuenta del valor de la fase de planificación, dado que es la que nos permitirá una ejecución correcta. Repito: Sin una buena planeación no habrá una buena ejecución.
4. Cómo hacer tus listas
Primero, escribe las tareas, no importa si usas lápiz y papel o alguna aplicación digital. Escribe todo lo que necesites hacer.
Después de escribir, es tiempo de organizar tu lista separando las tareas por área de tu vida (profesional, familiar, académica, lista de abarrotes para la casa) y finalmente la prioridad. Explico esto en detalle en este enlace.
En verdad, quiero que mires el vídeo para que entiendas la estructura de la gestión de tiempo y te organices con la lista de pendientes. Continuaré en el próximo vídeo de nuestra serie de Productividad Arata ¿está bien?
Lo más importante de este proceso, para aquellos que quieran ser más organizados con sus listas de pendientes, es conocer las tres tareas más importantes. Te enfocarás en estas.
Y con respecto a las demás, las EVITARÁS activamente. Si no son prioridad ¡No las hagas! Termina las más importantes primero.
Y si por acaso tu actividad prioritaria tarda mucho tiempo, muchas horas o muchos días, divídela. Divide esta actividad en piezas más pequeñas para que puedas terminar lo más importante y dedicar un poco del resto del tiempo a cosas que no son prioridad, pero que también son importantes para conseguir un balance en tu vida. Ese es el enfoque saludable que lograremos.
Tu lista de pendientes siempre es una herramienta útil. Cuando comienzas a tener miedo incluso de verla, eso significa que es un desastre y que no estás diferenciando entre contextos y dimensiones en tu vida, quizás no tiene prioridades. Tal vez las tareas no son claras o ni siquiera es posible hacerlas.
Visita este enlace ahora, para ver un vídeo más detallado sobre los errores más importantes y qué hacer para evitarlos.