Los Cuatro Caballeros de la Pobreza

Imagina: ganar nueve millones de euros… y gastártelo todo. Esto fue lo que le pasó a un basurero de Inglaterra llamado Michael Carroll. 

Ganó la lotería y se gastó todo el dinero. Y hoy vuelve a buscar trabajo como basurero. 

Es probable que conozcas otras historias como la de Michael. Y, antes de criticarles, la reflexión que podemos hacer es que quizá exista un poco de Michael en cada uno de nosotros. Estos son los CUATRO CABALLEROS DE LA POBREZA.

Se trata de cuatro elementos que nos hacen actuar de una forma no muy inteligente con el dinero. ¿Cuáles son?

El número 1 es la psicología del consumo. 

El número 2 es  nuestra evolución cultural y biológica

El número 3 es nuestro ambiente familiar

Y el 4, nuestros hábitos.

Dentro del curso de enriquecimiento financiero Riqueza Verdadera, vamos a explorar en detalle cómo cambiar nuestra mentalidad para protegernos de ellos. Te prometo que en este vídeo introductorio, haremos una presentación bastante rápida. 

Al respecto de la psicología del consumo, hay un documental en la BBC que siempre recomiendo a mis amigos, llamado The Century of the Self. Apunta: The Century of the Self, de la BBC. Este documental cuenta la historia de Edward Bernays y de la familia del famoso Sigmund Freud, que entendió la importancia de muchos símbolos de nuestra vida. 

Edward Bernays era sobrino de Freud y, podemos decir que es el responsable de que las mujeres fumen hoy en día. ¿Por qué? Al principio del siglo pasado, era un tabú muy grande que las mujeres fumasen. Entonces llegó un ciudadano llamado George Hill, que era presidente de la American Tobacco Corporation, y le dijo a Bernays, que era un asesor de la época: “Mira, estoy perdiendo la mitad de mi mercado por culpa del tabú de que las mujeres no fumen. ¿Qué puedes hacer al respecto?”

Riqueza Verdadera - Seiiti Arata, Arata Academy

Bernays hizo un investigación a fondo de nuestro comportamiento psicológico para entender cuáles son los símbolos que nos hacen actuar de forma irracional. Para eso, usó varias teorías de su tío Sigmund Freud y descubrió que había una conexión entre el cigarrillo y los símbolos fálicos, símbolos de poder. 

Luego recibió el consejo de algunos psicoanalistas de que si conseguí conectar la idea de fumar cigarrillos con desafiar al poder masculino, haría que las mujeres fumasen.

¿Cómo podría hacer una manipulación en masa? Sabía que todos los años, en Nueva York, había un desfile de Pascua al que asistían multitudes, y recibía mucha atención del público. 

Bernays acordó con unas debutantes de la alta sociedad que esconderían cigarrillos en sus vestidos y cuando diese la señal, se encenderían los cigarros y se pondrían a fumar. Al mismo tiempo, tenía contacto con algunos fotógrafos y periodistas y les dijo: – quedaos en ese lado, y cuando dé la señal, vais a encontraros con algo muy interesante. 

Entonces, los fotógrafos se juntaron con las jóvenes debutantes y les echaron fotos, que fueron impresas en las portadas de todos los periódicos americanos, e incluso algunos internacionales con titulares muy interesantes y simbólicos, que decían ¡Mujeres Encienden las Antorchas de la Libertad!

Esto conectó con un símbolo que era amado por toda la sociedad, la Estatua de la Libertad, y generó un debate público. En este debate, las mujeres que estaban de acuerdo en que deberían tener más poder e independencia, empezaron a fumar. Esta es una actitud extremadamente irracional (¿qué tiene que ver una cosa con la otra?) pero que va directamente de acuerdo con nuestros deseos, nuestras emociones, y Bernays supo jugar a este juego muy bien. 

Hay otras historias muy interesantes, por ejemplo la de Betty Crocker, empresa que fabrica esos preparados de pastel instantáneo. Y Betty Crocker tenía una receta instantánea en la que sólo tenías que echar agua, mezclar, y meter al horno, pero nadie la compraba. Por lo que se preguntaron: ¿Por qué, Bernays? ¿Por qué pasa esto? ¿Por qué nadie compra nuestra mezcla de tarta?

Recordemos que todo esto ocurrió en una época mucho más machista que hoy en día (imagina) y la mentalidad era diferente. En este contexto, Bernays descubrió que la mujer, cuando compraba la mezcla lista para tarta, la preparación era tan rápida y sencilla que se sentía culpable, perezosa. Parece como si no estuviera participando en el ritual culinario de entregarle algo a su familia. 

Y los empresarios se preguntaban:

– Pero, ¿qué hacer para combatir esa barrera psicológica y hacer que lo compren?

Y Bernays dijo que era algo sencillo: bastaba con romper dos huevos, mezclarlo con el paquete de la mezcla instantánea. De nuevo, era un acto simbólico. Romper los huevos hace que el proceso sea un poco más “casero”, rescatando esa magia, esa alquimia de la cocina, a pesar de ser poco relevante en el sabor del producto final. Solo que este pequeño detalle fue lo que hizo que se aliviase el sentimiento de culpa, y que las ventas empezasen a subir. 

Vale, pero, ¿qué tiene que ver esto con nuestra vida financiera? Es que todas nuestras decisiones de compra tienen una fuerte carga simbólica sobre cómo definimos nuestra identidad. Apunta, que es importante: las decisiones de compra tienen una fuerte carga simbólica sobre nuestra identidad. 

¿Por qué uso un determinado perfume? ¿Por qué conduzco un determinado coche? Todo esto tiene que ver con esa PSICOLOGÍA DEL CONSUMO, que influye mucho en nuestra identidad. Este era el primer Caballero de la Pobreza: tenemos que domar la psicología del consumo para estar protegidos contra la persuasión del márketing. 

Para tener acceso al contenido completo del curso, visita este enlace – luego te repetiré este link, al final, con una invitación especial. 

El segundo Caballero de la Pobreza es la evolución genética y cultural relacionada a nuestro hábito de consumo. 

Esta idea viene del libro Pandora’s Seed, de Spencer Wells, que es un antropólogo que estudió cómo influyó la agricultura en diversos elementos de la sociedad como por ejemplo nuestra condición de salud. Llega a decir que problemas como la diabetes e incluso el cambio climático global son efectos secundarios de la agricultura. ¿Cómo se aplica esto al consumo? cuando nos encontramos algún recurso, nuestro instinto nos motiva a consumirlo inmediatamente. Este es el deseo de gratificación inmediata. 

En el pasado, al encontrar un árbol con frutos o un animal adecuado para la caza, lo ideal es consumirlo inmediatamente, ya que no sabían cuándo sería la próxima comida. Por lo tanto, todos nosotros estamos influenciados por el impulso de consumo inmediato. Además, lo que dice sobre los alimentos, tenemos mecanismos para almacenar, en forma de grasa, para sobrevivir más tiempo. Pero hoy, con congeladores y supermercados, salarios, no necesitamos ya ese mecanismo, pero es un mecanismo que sigue en nuestro cuerpo, en nuestros genes y, sobretodo, para los que consumen en exceso alimentos que no son los correctos, puede causar sobrepeso y riesgos cardíacos. 

De forma parecida, nuestro impulso de gratificación inmediata es el hábito de consumo que hace que queramos gastar inmediatamente después de recibir el sueldo. Entonces, cuando tenemos un entrenamiento especial y dependemos sólo de nuestro instinto, tenemos la tendencia a comportarnos como el basurero Michael Carroll, que ganó mucho y se lo gastó todo. 

El tercer Caballero de la Pobreza es nuestra influencia familiar. Este es un punto muy delicado, te pido permiso para comentarte de forma general lo que ocurre con algunas personas, no todas, obviamente, pero sobretodo los que vienen de una familia sin una educación financiera sólida. 

Un ejemplo: Cuando eras un niño, y de vez en cuando tus padres llegaban a casa, de mal humor, hablando sobre el día terrible que han tenido con el jefe, con historias negativas y desde pequeños vamos recibiendo el mensaje de que el jefe, la persona que manda en la empresa, es una persona de mal carácter. Otro ejemplo: cuando hay una discusión en la familia y, en algún punto, el dinero forma parte de la discusión, también tenemos una mala asociación de que el dinero simboliza conflicto. Otra situación es cuando escuchas, también de pequeño, cómo a tus padres les gustaría hacer algo más pero no tienen dinero. El dinero aparece como símbolo de limitación, de pequeñez. ¿Recuerdas la importancia de los símbolos y toda la historia de Freud? Todos estos son algunos de los tipos de situación en el ambiente familiar que pueden, inconscientemente, generar una cierta resistencia, autosabotaje, una cierta emoción negativa con el dinero. Y no queremos amar al dinero, ni odiarlo: el dinero es una herramienta, es un hecho, un objeto. Es nuestro deber saber adquirirlo y utilizarlo correctamente, sin una carga emotiva innecesaria. 

Y el cuarto Caballero de la Pobreza aparece en forma de nuestros hábitos. Hay personas que están viendo este vídeo ahora que viven día a día orientados por hábitos de riqueza. Otras personas viven día tras día orientados por hábitos de pobreza, 

¿Cómo se manifiesta un hábito de pobreza? Son varias formas y te voy a ilustrar con un concepto que será muy útil durante toda tu vida, que es la idea del coste de oportunidad. Coste de oportunidad. 

Hay un episodio de Los Simpsons que ilustra esto de forma muy didáctica y divertida. Homer está conduciendo el coche con el hijo, Bart, y encuentran un camión volcado en el arcén. Era un camión que transportaba azúcar. Homer salta de alegría, diciendo que se va a hacer rico. Saquea el camión, llena su coche con azúcar y decide hacerse vendedor, de los que van puerta en puerta, para vender el azúcar. 

Su mujer Marge que, como siempre, es la mujer sensata de la historia, dice que no le gusta ese plan, que incluso los compañeros de trabajo de Homer habían llamado al teléfono preguntando porqué no había ido a trabajar. Estaban preocupados por si iba a volver o no al trabajo. Y Homer le dice “no te preocupes, Marge, mira – ¡tengo un dolar! me lo he encontrado en el suelo, en la parada del bus.”

Y Marge le dice que mientras él había ganado un dólar, había dejado de ganar cuarenta por no haber ido al trabajo. Entonces, de forma muy sencilla, esta historia ilustra la idea del coste de oportunidad. 

Es decir: ¿qué estamos haciendo hoy? ¿Usando nuestro tiempo, nuestros recursos, nuestro foco de atención? ¿Estamos dejando de ir tras otras oportunidades mejores? ¿Lo entiendes?

Por ejemplo, dices que vas a comprar un coche cero kilómetros. Catorce mil euros en metálico. ¿He renunciado a catorce mil euros por la decisión de comprar el coche? ¿O he renunciado a más de eso, ya que esos catorce mil euros en una sencilla inversión, rindiendo a  0,5 (cero con cinco) al mes, durante diez años, podrían transformarse en veintiséis mil euros?

Observa que existen diferentes perspectivas para entender nuestras decisiones. Y no existe correcto ni incorrecto. Todo es cuestión de nuestra preferencia, de nuestras prioridades. Solo que algunas decisiones están alineadas con hábitos de empobrecimiento y otras, guiadas por hábitos de enriquecimiento. El punto principal es que nuestro comportamiento está orientado por hábitos de nuestro día a día, que poseen un impacto muy fuerte en nuestro futuro financiero.

Te había prometido que este sería un vídeo muy rápido como presentación del curso de enriquecimiento financiero Riqueza Verdadera ( y en realidad son cinco caballeros de la pobreza – el quinto es tan complejo y poderoso – el miedo – que necesita más tiempo para poder explicarse, y se queda para un próximo vídeo). Si te ha parecido interesante y quieres saber más, entra en este enlace , donde tenemos todos los datos importantes, ya que los detalles solo se envían por email a los que se registran con el formulario de la página.